Welcome to California

Todos los días me levantaba temprano solo para verla irse, nunca supo donde iba. Pero sabía que ahí estaba mi amor.

La mañana de ese martes fue un tanto extraña mi despertador no sonó. Me levante por un impulso que venía de lo más profundo de mi. No la vi salir por la dudas me fije el reloj, eran las 5.30 faltaba media hora para verla. Busque una manta y me senté en la silla que tenía cerca de la ventana. Mire y mire. No encontré señales de ella. Los minutos pasaron el reloj con su tic tac marcaba que ese día seria especial. No era como otros. Ese fue el momento donde me embarque en un viaje sin regreso.

Me tome un baño, mientras el agua caía sobre mí, yo pensaba. Salí de la ducha. Se me erizo la piel. Tome la toalla y me seque. Fui a mi dormitorio un tanto desorientado. Me cambie. Tome esa taza de café que me haría volver a la realidad. Y Salí a la calle.